Quito -

El técnico colombiano Santiago Escobar pasa por “una dura prueba”: el cafetero fue diagnosticado con cáncer de próstata, un tratamiento que está en fase inicial; sin embargo, su “pasión por el fútbol” es la mejor medicina, con Universidad Católica y su regreso a la Copa Libertadores en la mira.

“No niego que he tenido momentos de debilidad, que he llorado porque tenía que digerir la noticia, pero tenía que dejar pasar unos días para hablar, ahora estoy más comprometido que nunca con mi trabajo”, dijo Escobar en su primera aparición este año, durante una conferencia de prensa virtual del equipo camarata.

El colombiano se presentó al trabajo con su equipo, “una muestra de compromiso con el club, por sus ganas de luchar y seguir adelante. La situación médica es complicada, pero estamos convencidos de que por su fortaleza y empuje va a salir adelante”, señaló Santiago Cattani, presidente del equipo santo.

De vuelta con sus dirigidos, Escobar se mostró agradecido por las muestras de afecto recibidas de parte “de la sociedad ecuatoriana y la familia del fútbol en Ecuador, Colombia, Venezuela y Bolivia, donde la vida me ha permitido trabajar. A todos quienes me han expresado un cariño muy grande, en un momento difícil”, apuntó.

Escobar está “emocionado” por regresar al club, pero sobre todo convencido “de que voy a salir adelante porque estoy fuerte, porque tengo muchas ganas de seguir, de estar con mi trabajo, mi pasión, de volver a mi casa porque eso ha sido Universidad Católica para mí”, señaló.

El DT cafetero habló de superar “una prueba más en la vida”, para eso apela al respaldo emocional de su familia y la fe. “Esta enfermedad se la ofrezco a Dios, con cariño y con amor, porque en tres años esto va a ser anécdota, voy a estar bien, tengo la seguridad de que voy a ganar esta batalla, como he ganado otras en mi vida”, comentó.

Escobar inició en Medellín un tratamiento con medicación y hormonas, pero en acuerdo con sus médicos “la radioterapia la comenzaré en febrero, ese fue el pedido a mis médicos, por eso estaré estas tres semanas en Quito”, explicó.

Su permanencia en el país será hasta el 25 de febrero, tiempo en el que preparará la pretemporada con sus dirigidos y sus primeros partidos en la Libertadores, luego regresará a Colombia para cumplir con sesiones de radioterapia cada 24 horas.

"Finalizado abril, espero estar en Quito otra vez. Luego tendré revisiones de dos o tres días cada tres meses. Será un proceso que va a llevar un tiempo, pero que mis ganas de estar en actividad y tener la mente ocupada con el fútbol, que es lo que más me gusta. Me siento fuerte y bien, por eso he decidido venir y acompañar a mi cuerpo técnico y jugadores”, apuntó. (D)

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