El pasado viernes, 26 de noviembre de 2021, la Organización Mundial de la Salud (OMS) clasificó la variante B.1.1.529 de covid-19 (conocida popularmente como ómicron) como variante "preocupante" e hizo un llamado a las naciones para fortalecer las medidas de bioseguridad. De acuerdo con la OMS, ómicron presenta varias mutaciones que podrían afectar a las características del virus, por ejemplo, la facilidad para propagarse o la gravedad de los síntomas que causa.
Aunque el virus ya ha estado circulando por países como Australia, Austria, Bélgica, Botsuana, Canadá, República Checa, Dinamarca, Alemania, Hong Kong, Israel, Italia, Países Bajos, Portugal, Reino Unido, no se tenía información de su presencia en Latinoamérica. No obstante, en las últimas horas la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria de Brasil (Anvisa) confirmó que se han identificado dos casos de la variante en ese país.
? #URGENTE | Brasil identifica de forma preliminar dos casos de la variante Ómicron.
— Mundo en Conflicto ? (@MundoEConflicto) November 30, 2021
Según Anvisa, el virus fue identificado en dos pasajeros brasileños procedentes de Sudáfrica y la información preliminar especificó que la entrada de los viajeros se produjo el pasado martes, 23 de noviembre de 2021, es decir, antes de la notificación mundial sobre la identificación de la nueva variante, que fue reportada por primera vez a la OMS por Sudáfrica el miércoles 24 de noviembre de 2021.
Cabe mencionar que desde el 27 de noviembre están prohibidos en Brasil con origen o paso por la República de Sudáfrica, la República de Botswana, el Reino de Essuatini, el Reino de Lesotho, la República de Namibia y la República de Zimbabwe. Además, Ansiva afirmó que desde el gobierno brasileño ya están trabajando para identificar posibles riesgos de la variante, evaluarán las condiciones de salud y dirigirán a las personas a los servicios de salud.
Las recomendaciones de la OMS
La OMS recomendó varias medidas a los países, entre ellas están: aumentar la vigilancia y la secuenciación de las muestras tomadas de los casos; intercambiar las secuencias genómicas en bases de datos abiertas, como la GISAID; notificar a la OMS los casos o conglomerados de casos iniciales; y llevar a cabo estudios de terreno y evaluaciones analíticas para conocer mejor si la variante ómicron presenta características distintas en lo relativo a su transmisibilidad.
Asimismo, aseveró que los países deben continuar aplicando las medidas de salud pública de eficacia demostrada para reducir de forma general la circulación del virus causante de covid-19, basándose en el análisis de los riesgos y en un enfoque científico. Además, deben aumentar su capacidad de respuesta mediante recursos médicos y de la salud pública para hacer frente a posibles aumentos en el número de casos.
"Del mismo modo, es fundamental reducir las desigualdades que afectan al acceso a las vacunas contra el covid-19 para asegurarnos de que, en todos los países, se administran la primera y la segunda dosis de las vacunas a todos los grupos vulnerables de la población, incluidos los trabajadores de la salud y las personas mayores, además de ofrecerles de forma equitativa las pruebas diagnósticas y los tratamientos que necesitan", indicó la OMS.
Finalmente, la organización pidió mantener medidas de autocuidado como una distancia de al menos un metro de las demás personas, llevar una mascarilla bien ajustada, abrir las ventanas para ventilar las estancias, evitar los lugares cerrados o poco ventilados, mantener limpias las manos, toser y estornudar en la flexura del codo o en un pañuelo desechable y vacunarse cuando les llegue el turno.