La celebración fue semejante a la conquista de un título. Deportivo Cuenca ganó el miércoles 2-1 a Emelec en los minutos de adición, con un remate de Diego Dorregaray de larga distancia, segundos interminables para que el balón entre al arco, como largo se hizo un año con múltiples tropiezos en cancha y escritorio.
A la última fecha los colorados llegan fuera de cualquier compromiso con el descenso, pero para salvar la temporada sortearon inconvenientes futbolísticos y económicos, incluso con la suspensión de sus derechos deportivos, por lo que no se presentaron a la jornada final de la primera etapa.
La paralización por la pandemia tuvo matices oscuros para el plantel. Haberes impagos, reducción de sueldos, paralizaciones, salida de jugadores, cambio de técnico y de directiva, todo en un cúmulo de situaciones que tenían al equipo colorado como serio candidato al descenso.
Cuenca fue el peor de la primera etapa, sumó ocho puntos de 45 posibles. Para la segunda parte del torneo llegó a la presidencia Nataly Villavicencio y con su grupo Guillermo Duró a la dirección técnica.
En catorce fechas disputadas, los colorados suman 23 puntos, a 5 de Barcelona, líder de la etapa. Con el triunfo ante Emelec salvaron la categoría y entre la motivación del grupo estuvo la “respuesta dirigencial”, destacó el DT Duró.
“La directiva pagó octubre, noviembre y ahora diciembre. El equipo se brindó, los jugadores se mataron porque encontraron respuesta del dirigente. Desde que llegué (octubre) solo tuvimos dos días libres, siempre concentrados en el objetivo”, apuntó el estratega argentino.
Celebraciones
El partido de salvación del Cuenca se jugó con intereses arriba y abajo en la tabla. El local para evitar el descenso y Emelec para aspirar a la final.
Cuenca fue dominado, se quedó con uno menos por expulsión de Anthony Bedoya (35 min), pero fue al descanso 1-0 con gol de Dorregaray. Al 86 min, José Cevallos empató y en adicionales (90+7 min) Dorregaray anotó para el triunfo.
El equipo lo festejó en la cancha y afuera del estadio un puñado de hinchas esperó por la salida del plantel.
Duró salió del camerino y alentó a la hinchada, que por su parte ovacionó el trabajo de la presidenta Villavicencio.
“Estoy orgullosa de mis leones por este resultado. También por el apoyo de la hinchada”, expresó la directiva.
Conseguida la permanencia, Cuenca proyecta el 2021. “Será un torneo distinto. En lo deportivo lleno de ilusiones con un equipo más competitivo y peleando primeros lugares como lo hicimos esta etapa. Estabilizaremos al club, porque si estamos bien las oficinas, estaremos bien en la cancha”, concluyó Villavicencio. (D)