Geovanny Caicedo y Franklin Salas son dos de los protagonistas de la única final que han jugado Barcelona y Liga de Quito en la historia del campeonato ecuatoriano, la del torneo Apertura 2005. Esa temporada es, hasta hoy, la única en que se han realizado dos certámenes, ya que en el Clausura de ese año el monarca fue El Nacional.

En el Apertura la Cuchara Caicedo fue parte de Barcelona, que se impuso 1-0 en la ida, con gol del zaguero en el Monumental. Pero el 24 de julio de hace quince años los albos golearon 3-0 en Casa Blanca; el Mago Salas hizo un tanto. El exzaguero canario y el atacante azucena, ambos ahora con 39 años, recordaron esos dos choques del 2005 y también se refirieron al duelo de hoy.

“Fue una linda final porque nosotros veníamos bien, dejando en el camino a El Nacional, que era candidato al título y le ganamos en Quito. Estábamos muy ilusionados”. Pero en la vuelta Barcelona se presentó disminuido por las ausencias del portero titular, Edwin Villafuerte, lesionado; de Ángel Escobar, suspendido; y de Jaime Iván Kaviedes, separado por indisciplina.

Solo una vez se han medido toreros y albos por finales.

Para el Mago esa final en el escenario de Liga “fue un partido importante para nosotros. Era definitorio, defendíamos un invicto largo y teníamos la mentalidad de ganarlo”. Y así ocurrió. Carlos Espínola, Salas y Néicer Reasco anotaron para el 3-0 que le dio el octavo título a los universitarios, dirigidos por el peruano Juan Carlos Oblitas. Se produjo un hecho histórico: Álex Aguinaga logró su primera y única corona en Ecuador, tras volver al país luego de catorce campañas de gloria en México.

Caicedo y Salas coinciden en que “una final es algo especial”. Según la Cuchara, “se siente una emoción tremenda y más cuando se enfrenta a otro grande, como Liga (Q). Uno sale a la cancha, y ver el estadio reventar por la cantidad de hinchas causa una emoción que no hay palabras para definirla”.

El Mago dice: “Son momentos lindos. Todo el país se paraliza por lo que significa Barcelona, por el crecimiento que ha tenido Liga (Q). Esta (de hoy) es una final esperada y casi a la par de un partido final entre Barcelona y Emelec”.

Del compromiso de hoy Caicedo opina que “será parejo, porque ambos equipos llegan bien. Va a ganar el que mejor haga las cosas”. Salas añade que “los dos equipos merecen estar en la final; han tenido más regularidad. Esperemos que sea una digna final, que todo el país la pueda ver”.

¿Y quién es el favorito? “Que gane el mejor. Son dos grandes clubes, jugué con las dos camisetas. Les deseo éxitos a los dos, pero ojalá se le pueda dar a Barcelona”, responde Caicedo. Salas no es diplomático: “Siempre voy a querer que gane Liga, no porque sea favorito, sino por mis sentimientos: siempre van a ser por Liga de Quito”.

Cuchara habló del invicto albo en su estadio, en la final de vuelta. “Siempre hay ese temor y más en una final. El corazón late mas fuerte”. Salas reconoce que siempre ha existido temor en Liga de perder la hegemonía sobre Barcelona como local. “No es solo por la final, es siempre que hay un partido con Barcelona en el estadio Rodrigo Paz. Pero ellos quieren terminar con una mala racha larguísima y a veces ese peso juega en contra”. (D)

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