Llegó con perfil bajo y sin mucho ruido. Alejandro Restrepo fue la gran apuesta de los directivos de Nacional, en la que pocos creyeron, pero que no defraudó. En menos de seis meses, consiguió junto a su staff y jugadores conquistar la Copa BetPlay, un título liberador para el club por los tres años de decepciones, que además elevó el status del entrenador.
En su primera experiencia con un equipo profesional en propiedad, el antioqueño sorteó la presión, supo convencer al grupo de jugadores y conformó una buena dupla con Francisco Nájera, quien pasó de director deportivo a asistente técnico, y acertó.
"He vivido, he estudiado y he aprendido a reconocer las raíces y las tradiciones de Atlético Nacional. Conozco el valor de sus títulos y de las personas que han estado acá", dijo el DT en su presentación el 9 de junio.
Para algunos, su hoja de vida no decía mucho en comparación con Osorio, Rueda, Autuori y Guimarães. Pero tenía muchos partidos encima y títulos con la Selección Antioquia Juvenil, Prejuvenil e Infantil.
Acumuló suficiente conocimiento y rodaje como técnico del Club Deportivo Estudiantil en sus inicios, antes de esa etapa exitosa con varias categorías del seleccionado antioqueño.
En enero de 2019 llegó a las divisiones menores de Nacional para dirigir al equipo sub-20. Ese mismo año, tras la salida del brasileño Paulo Autuori, asumió como técnico interino en cuatro partidos, en los que dejó buenas sensaciones.
La historia se repitió en 2020 cuando terminó la segunda etapa de Osorio. Se hizo cargo del equipo en las finales de la Liga, pero un brote de Covid-19 lo privó de trascender. También hizo parte del equipo de trabajo de Guimarães.
Y llegó la gran oportunidad… supo rodearse y aprovechar la sapiencia de hombres como Francisco Maturana. Rápidamente implantó su idea de juego, creó familia y elevó el nivel de varios jugadores para desarrollar una campaña con puntos altísimos, buena gestión de la plantilla y muchos aciertos.
"Alejo tiene muchas competencias… su capacidad de análisis", destacó Nájera sobre su compañero de fórmula, en una entrevista con AS, en la que contó que como entrenador, Restrepo "tiene la habilidad para conectar con sus jugadores. En la sesión de entrenamiento es apasionado”.
Hoy, en su primera final, puso su nombre en la historia verdolaga al quedarse con el título de la Copa, su primero como profesional, que le permitirá dirigir en la Libertadores el próximo año. Pero antes, tiene la opción de ir por la estrella 17 tras cabalgar la Liga y demostrar que no lo designaron por casualidad. ¿Aprendiz? Restrepo ya probó su valía.