Seis partidos en el FPC ya le permitieron al argentino Emmanuel Olivera hacer un diagnóstico sobre el terreno que está pisando. De entrada, detectó que tiene que ajustarse para no pasarla mal ante los rápidos atacantes que pululan acá. Y, por otro lado, percibió que falta intensidad y que a veces el juego se hace un poco más lento, en comparación a la velocidad a la que se compite en su país.
Tras esa primera lectura en su corta experiencia en Colombia, el central solo espera adaptarse a esas características para alcanzar lo que se propuso con Atlético Nacional: "Vengo por cosas importantes; vengo en busca de gloria".
Esa gloria estuvo cerca de abrazarla con Colón de Santa Fe cuando disputó la final de la Copa Sudamericana 2019 y quedó en el once ideal de la competencia. Espera reeditar ese buen momento en su carrera, pero en otro escenario y realizando los arreglos necesarios para encajar en un entorno desconocido.
"Acá estoy muy a gusto y ha sido una experiencia muy linda", dijo Olivera, y agregó sobre lo que se ha encontrado en las canchas colombianas: "Son jugadores muy rápidos, y eso tengo que trabajarlo más, debo ser un poco más tiempista y darme ese espacio porque sé que son rápidos y no se puede dar ventaja… lo pagás muy caro. Eso es fundamental para lo que viene".
A pocos días del estreno en la Copa Libertadores, el argentino dio un dictamen sobre las diferencias que encontró entre su nuevo hábitat profesional y lo que vivió en su recorrido por Vélez Sarsfield, Almirante Brown y Boca Unidos en su país.
"Vengo del fútbol argentino, y todos saben que es muy intenso. Se hace muy difícil jugar. Yo creo que el fútbol colombiano es más técnico y un poco más lento", apostilló el defensor.
Luego aterrizó esa opinión a Nacional y al reto que se avecina cuando se enfrente la próxima semana a Guaraní o a Royal Pari. "Hay que enfocarnos en darle intensidad al juego. Cuando no tengamos la pelota, tenemos que ser un poco más intensos en ese sentido. Creo que el equipo viene levantando y colectivamente se hicieron muy buenos partidos, pero en una copa internacional no puedes dar ninguna ventaja porque es muy difícil. Hay que trabajar", advirtió.
Recuperar la seguridad defensiva ante Petrolera
Mientras llega ese momento de competir a nivel continental, Olivera admitió que la defensa verdolaga tuvo un retroceso en los juegos ante América y Bucaramanga que se tradujo en los cinco goles que recibió en esas dos presentaciones.
"Yo creo que hemos cometido unos errores claros que cuestan muy caro. La comunicación y confiar un poco más en el compañero es fundamental. Hay que tratar de seguir trabajando para que eso no vuelva a pasar", opinó el gaucho.
En cuanto a ese proceso de consolidación en defensa, el exjugador de Colón indicó que en este momento "nos vamos conociendo", pero debe aplicarse muy pronto con sus compañeros para recomponer el camino y que "estos errores no se cometan más y ser una defensa muy sólida".
"Conseguimos tres partidos con el arco en cero. Y la idea es seguir de esa manera y no como en los juegos anteriores, que por desconcentraciones nos han convertido", afirmó el nacido en Buenos Aires, quien está satisfecho con Yerson Mosquera, el canterano de 19 años que lo acompaña en esa línea de tres que montó Guimarães con Danovis Banguero. "Tengo un compañero joven, pero es muy buen jugador. Quedé muy asombrado. Tiene muchas condiciones, pero también mucho por aprender. Creo que va bien encaminado", expresó.
Por último, Olivera espera que el comportamiento de Nacional esta noche (8:00 p.m.) ante Alianza Petrolera refleje seguridad defensiva y los lleve a seguir escalando en el torneo doméstico.
"Hay que afrontarlo de la mejor manera e ir a buscar el partido desde el primer minuto. Me estoy dando cuenta de que cualquier equipo quiere ganarle a Nacional y no hay que salir desconcentrado. Hay que dar un plus para no llevarnos sorpresas y quedarnos con la victoria", declaró el central de 30 años.