En la intimidad del camerino del estadio Atahualpa, Fabián Bustos, con leva gris, camisa blanca y pantalón oscuro (en el mismo vestuario que usó durante toda la segunda etapa del torneo), pidió al grupo de jugadores de Barcelona que formasen un círculo para dedicarles unas palabras.
El equipo había empatado minutos antes sin goles ante Universidad Católica, y con ello había asegurado su paso a las finales del torneo. Emocionado, Bustos agradeció el compromiso del plantel. “Hemos trabajado duro durante este año difícil para lograr esto. Gracias a ustedes y a la dirigencia, que siempre nos apoyó. Ahora, muchachos, solo nos queda un pasito más para celebrar”, dijo el DT, de 51 años, según se observó en un video publicado en las cuentas del cuadro guayaquileño.
El ‘pasito más’ del que habla Bustos es la final del torneo. La serie que finaliza este 29 de diciembre de 2020 (20:15) en Quito. Barcelona se enfrenta a Liga en el estadio Rodrigo Paz.
El DT juega por segundo año consecutivo la definición del Campeonato. Lo hace frente al mismo rival (Liga) y frente al mismo entrenador (Pablo Repetto). El 15 de diciembre del 2019, Bustos logró la corona con Delfín, tras una definición por penales con resultado inusual: los ‘cetáceos’ ganaron la serie por 2-1.
Al día siguiente, Bustos viajó de Manta a Guayaquil para ser presentado como entrenador de Barcelona, en donde este año cumplió una campaña de buenos números: los toreros ganaron la segunda etapa y fueron escoltas de LDU en la tabla de posiciones acumulada con 58 puntos, uno menos que su rival de esta noche.
Bustos tiene un duelo táctico con Pablo Repetto, un colega de profesión con el que guarda una relación de amistad y respeto mutuo. Entre ambos suman más las coincidencias que los desencuentros.
Bustos dirige en Ecuador desde el 2011, cuando asumió en Deportivo Quito; Repetto, desde el 2012, cuando llegó a Independiente. Se han enfrentado en 14 ocasiones. Hay paridad en los indicadores: cuatro victorias para cada uno y siete empates entre sus equipos.
Este año, Repetto salió airoso en sus tres encuentros: en marzo, Liga ganó 2-1 a Barcelona y en noviembre, el resultado fue 2-2 en Guayaquil. En la primera final, el pasado 23 de diciembre, se registró un empate 1-1.
Pese a dirigir a los dos equipos más efectivos de la temporada, ambos son vistos con lupa por las exigentes hinchadas de albos y toreros. Durante el año, los técnicos se han armado con la paciencia bíblica de Job para responder en ruedas de prensa una misma pregunta: ¿por qué su equipo es tan defensivo?
El famoso sambenito de ‘técnicos amarretes’ no es tan preciso: la Liga de Repetto es el equipo más goleador del torneo: marcó 60 goles en 30 cotejos, un promedio de dos por partido. El Barcelona de Bustos fue el equipo más seguro en defensa del año, con 20 tantos recibidos en 30 juegos, pero no solo eso: su equipo fue el mejor local del torneo, con 37 puntos en los 15 partidos que disputó en el estadio Monumental. Nadie pudo vencerlo.
¿Qué piensa Bustos sobre las críticas a su estilo de juego? “Esos son debates que pueden durar horas, días. Yo respeto la opinión de la gente, pero creo que mi equipo ha dado buenos resultados. No hemos perdido en casa. En la segunda etapa solo nos hicieron siete goles en 15 partidos. Sabemos atacar y lastimar al rival en los momentos justos”, declaró el DT.
¿Y qué dice Repetto? “No me gusta opinar sobre comentarios de la gente. No sé que es jugar bien. Hemos dominado el torneo por largos tramos y ahora tendremos que afrontar la final con todo lo que tenemos para intentar ganarla”, dijo el uruguayo de 46 años.
Repetto lleva tres temporadas y media con los albos. Fue campeón del torneo en el 2018, de la Copa Ecuador en el 2019 y de la Supercopa en esta temporada, antes de que el mundo se alterara por el covid-19.
Los dos técnicos, cuestionados pero exitosos, se citan en Ponciano para jugar la segunda final. Será el duelo número 16 entre ambos. ¿Quién sonreirá luego de los 90 minutos?