El pasado viernes 16 de julio, el presidente Iván Duque sancionó la Ley 2101 del 2021, la cual ordena la reducción de la jornada laboral de 48 a 42 horas semanales. Dicho proyecto, fue liderado por el exsenador Álvaro Uribe Vélez, y aprobado en votación por la Cámara de Representantes, antes de convertirse en la nueva ley laboral que se implementará de forma gradual en el país: en el año 2023, se comenzará con la reducción de una hora; un año después, se disminuirá otra hora, mientras que en 2025 la jornada será de 44 horas. Finalmente, para el 2026 el horario laboral quedará reducido a las 42 horas.

El proyecto estará enfocado en mejorar la calidad de vida de los empleados a través de espacios para el deporte, la recreación y el tiempo en familia, pues según indica la ley "el empleador debe respetar todas las normas y principios que protegen al trabajador". De igual manera, aunque la modificación de la jornada laboral no contemplará exoneración de obligaciones, tampoco maneja una reducción del salario de los trabajadores ni un recorte en los días de descanso y vacaciones. Estas, entre otras razones, han provocado que varios sectores empresariales hayan encontrado reparos en la norma.

¿Por qué los empresarios se oponen a la ley?

Han sido varios los representantes de importantes gremios empresariales los que se han mostrado en contra de la implementación de la ley 2101, debido a que, según afirman, el país atraviesa un momento en el cual las prioridades deben ser otras. Según afirmó Jaime Alberto Cabal, presidente de Fenalco, en entrevista con W Radio, dicho proyecto sólo estimularía la informalidad, pues lo que necesitan los colombianos actualmente son oportunidades de empleo. Adicionalmente, los costos laborales de contratación se elevarían y se generarían cargas excesivas a las nóminas.

De igual manera, el líder empresarial aseguró además que las condiciones en las cuales se aprueba el proyecto son totalmente distintas al contexto que atravesaba el país en el momento en el que se presentó, pues en el año 2020 el país atravesaba una fuerte crisis a causa de la pandemia. "Este es un proyecto de ley que fue pensado en un país que no es el de hoy. Es absurdo que cuando el país necesita iniciativas que estimulen la generación de empleo, el Congreso legisle en la dirección contraria. Reconocemos la posición de los congresistas que se opusieron a esta iniciativa y de aquellos que introdujeron la propuesta de gradualidad, de lo contrario las consecuencias serían mayores", resaltó Jaime Alberto Cabal.

Hay que recordar que, actualmente la jornada de 48 horas muchas veces se ve reducida debido a los permisos sindicales, la calamidad doméstica, el ejercicio del sufragio, las licencias de maternidad, paternidad y luto, las incapacidades, la jornada de la familia, entre otras, razón por la cual, según afirmó el presidente de Fenalco, el actual proyecto es inviable para los sectores. 

Por su parte, el presidente de la ANDI, Bruce Mac Master, desde el 2020 había venido señalando que la reducción de la jornada laboral sólo podría generar encarecimiento de la creación del empleo, lo cual afectaría gravemente la competitividad. Del mismo modo, en diálogo con Blu Radio, el dirigente empresarial aseguró que una de las principales dificultades del mercado laboral colombiano es la informalidad, motivo por el cual solicitaron al Congreso evitar seguir fomentándola. "El proyecto de reducción de Jornada Laboral es contrario a la realidad que estamos viviendo en Colombia. (...) En Colombia tenemos una crisis de viabilidad empresarial importante. Hubiéramos mejor creado incentivos para que las empresas generaran empleo", resaltó Mac Master.

Adblock test (Why?)