El objetivo de la directiva de Liga de Quito es claro: Seguir bajando el presupuesto del equipo durante le 2022. Con esa premisa, el cuadro albo es uno de los equipos de la Serie A que menos contrataciones ha confirmado y apostará por los jugadores de su cantera.
Los argentinos Zaid Romero y Tomás Molina, reforzarán la defensa y delantera, respectivamente. Así mismo, el nacional Andrés López se sumará para ayudar como lateral diestro. Hasta este 2 de enero de 2022, no había más novedades.
Uno de los reclamos de los hinchas, es que ambos fichajes foráneos provienen de la segunda división de Argentina y no los antecede un gran cartel.
La tarea pendiente es el fichaje del arquero reemplazará al lesionado Adrián Gabbarini. Tras las fallidas negociaciones con Hernán Galíndez, Alexander Domínguez y Jorge Pinos, el entrenador albo, Pablo Marini, adelantó que buscan a un extranjero.
El presupuesto de Liga durante el 2021 fue de USD 14 millones, y debido a la crisis generada por la pandemia del covid-19, los capitalinos están obligados a seguir reduciendo costos; la meta es bajar la mencionada cifra hasta en un 35%.
Su rendimiento deportivo tampoco ayudó, porque su quinto puesto en la tabla acumulada les impidió llegar a la Copa Libertadores y conformarse con los premios que entrega la Copa Sudamericana, abismalmente inferiores a los que da el principal torneo del continente.
Marini quiere a un equipo rápido, ofensivo y contundente. Para ello deberá reforzarse en otros puestos, haciéndose énfasis en los talentos de las formativas. En el 2021 la aparición de Nilson Angulo le dejó un buen sabor al DT.
Según la planificación, el cuadro albo iniciará su pretemporada este 5 de enero, en el complejo de Pomasqui. Además de los jugadores del primer equipo, Marini citó a futbolistas de las reservas y del equipo sub 18, que se coronó campeón nacional sobre Independiente del Valle.